What to Know
- Los activistas, que apoyan el régimen de Nicolás Maduro, habían estado dentro de la embajada desde hace más de un mes.
- Los venezolanos en DC, partidarios de Juan Guaidó, habían estado protestando afuera y exigiendo que abandonen la sede diplomática.
- El martes, los activistas fueron acusados de violar la propiedad privada pero se negaron a salir del inmueble pese a amenazas de la policía.
WASHINGTON - Los últimos cuatro activistas estadounidenses partidarios del presidente venezolano Nicolás Maduro que permanecían en el interior de la Embajada de Venezuela en Washington para impedir la entrada de los enviados del líder opositor Juan Guaidó fueron detenidos este jueves por las autoridades de EE.UU.
"Cuatro personas han sido detenidas en el interior, pero no puedo confirmar si ha sido el Servicio Secreto. Es una violación de la Convención de Viena", dijo a Efe la directora nacional de Code Pink, Ariel Gold, cuyo grupo apoyaba a los activistas.
El Servicio Secreto estadounidense, que se encarga de la protección de las legaciones diplomáticas extranjeras, confirmó este jueves a Efe que agentes ejecutaron órdenes de arresto contra "individuos que estaban dentro de la Embajada de Venezuela"
En las últimas semanas, la embajada -ubicada en el acomodado barrio de Georgetown- se había convertido en un reflejo de la confrontación entre el populista Maduro y el líder opositor Juan Guaidó por el poder en la nación sudamericana.
Maduro invitó a los activistas de los grupos Codepink, Answer Coalition y Popular Resistance a la embajada cuando Estados Unidos y otros 50 países reconocieron a Guaidó como presidente interino. Los diplomáticos cerraron la embajada y se marcharon a casa. Los activistas, que se hacen llamar el “Colectivo de Defensa de la Embajada” permanecen.
Ellos consideran a Maduro, cuyo gobierno es reconocido por la Organización de Naciones Unidas, como líder legítimo de Venezuela.
Un grupo de venezolanos que apoyan a Juan Guaidó había estado día y noche afuera de la embajada, exigiendo indignados que los “invasores” estadounidenses que apoyan a Maduro salgan de la sede diplomática. Ejercieron presión bloqueando las entradas y ventanas para evitar que los activistas pudieran pasar comida a los estadounidenses que se mantenían adentro, y así se vieran forzados a salir.
El martes, varios activistas estadounidenses ignoraron acusaciones de invasión de propiedad privada de las autoridades y se quedaron atrincherados en la embajada venezolana.
En ese entonces, ellos dijeron que planeaban quedarse dentro de la sede diplomática pese a advertencias de agencias del orden, desafiando el reconocimiento del gobierno estadounidense del líder opositor Juan Guaidó como presidente legítimo de Venezuela.
“No vamos a acatar la orden. Es ilegal”, dijo el activista Kevin Zeese a reporteros el martes desde la ventana del segundo piso del edificio.
Las advertencias de las autoridades a los ocupantes de la embajada surgieron después de que Carlos Vecchio, designado por Guaidó como nuevo embajador en Washington, pidió la ayuda de Estados Unidos para desocupar el edificio.
El Departamento de Estado dijo el martes que “hasta tanto se hayan ido los intrusos, no se permitirá el ingreso de individuo alguno a la embajada”.
Al principio, al menos 30 activistas entraron a la embajada, pero sus números se habían ido reduciendo considerablemente. Carecían de electricidad desde la semana pasada.
Local
Guaidó agradeció el jueves a la diáspora venezolana por “ejercer soberanía” y “recuperar nuestra embajada en Washington”, y dijo, en un breve mensaje de su cuenta de Twitter, que se inicia el “proceso de recuperación” de las sedes diplomáticas venezolanas en el mundo. “Estaremos en todos los planos de lucha por la democracia”, agregó.
