Virginia

Huellas dactilares vinculan a hermanos con una violación ocurrida en 1988 en el condado Fairfax

Debido a la prueba de ADN, la policía determinó que los hombres agredieron físicamente a una mujer cuando salía de su trabajo en el Skyline Mall en Leesburg Pike en Falls Church la noche del 24 de agosto de 1988.

Más de 30 años después de que una mujer fuera secuestrada y violada en el condado Fairfax, Virginia, la policía informó que dos hermanos fueron los responsables, y nuevas pruebas de huellas dactilares los ayudaron a realizar un arresto.

George Thomas Jr., de 61 años, fue arrestado el lunes en la estación de metro de Friendship Heights en Maryland y acusado de dos cargos de violación, sodomía y secuestro.

La policía del condado Fairfax indicó que Thomas Jr. y su hermano menor Gregory Allen Thomas, quien murió en 2009, agredieron físicamente a una mujer cuando salía de su trabajo en el Skyline Mall en Leesburg Pike en Falls Church la noche del 24 de agosto de 1988.

Los hermanos obligaron a la víctima de 22 años a subir a su automóvil y la obligaron a conducir a dos lugares diferentes, donde ambos la agredieron sexualmente, según la policía.

Después de la segunda agresión, la mujer logró llegar a su automóvil y escapar de ellos, según las autoridades.

Los detectives no pudieron realizar ningún arresto en el caso, pero continuaron investigando el crimen a lo largo de los años, expresó el departamento de policía.

Luego, se produjo una ruptura en el caso cuando Thomas Jr. fue arrestado en Arlington en 2020 por un delito diferente. Las huellas dactilares que tomó la policía cuando lo arrestaron coincidieron con las huellas encontradas en el automóvil de la víctima de 1988. Las autoridades también informaron que otra huella dactilar del automóvil coincidía con la de Gregory Allen Thomas.

Luego, los investigadores obtuvieron el ADN de los hermanos y encontraron que coincidía con la evidencia de ADN recuperada después de la agresión.

“Los avances en tecnología nos permiten revisar casos de hace décadas con los recursos a nuestra disposición. No importa el tiempo que haya pasado, nuestros detectives y personal profesional siempre lucharán por respuestas, resolución y alguna medida de justicia para aquellos afectados por estos delitos”, concluyó el alguacil del Departamento de Policía del condado Fairfax, Ed O’Carroll.

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