La alcaldesa de Washington, D.C., Muriel Bowser, envió el miércoles una carta al presidente Donald Trump solicitándole que trabaje con el Congreso para que termine el cierre parcial del gobierno federal y diciéndole que este bloqueo indefinido afecta gravemente a los residentes, negocios y contratistas federales de la capital.
“Durante el cierre de gobierno, no hay ganadores y los trabajadores federales de nuestro país, incluyendo los 170,00 empleados que laboran en Washington D.C. pagan el costo más alto”, dice Bowser en el mensaje.
“Más del 70 por ciento de los trabajadores estadounidenses viven de cheque a cheque y este cierre perjudica su estabilidad y restringe severamente su acceso a servicios gubernamentales. Y, puede ser devastador para aquellos que no tienen una paga retroactiva garantizada.”
Al menos 800,000 empleados del gobierno se han visto afectados por el cierre parcial que inició el sábado. Muchos de ellos están laborando pero deben esperar hasta que el cierre termine para recibir su paga.
El miércoles fue el primer día laborable tras el estancamiento presupuestario entre el Congreso y Trump y las vacaciones por Navidad. La disputa entre las ramas del gobierno parte de su desacuerdo sobre el muro fronterizo propuesto por el primer mandatario.
El martes, Trump dijo que el cierre continuaría hasta que los Demócratas accedan a asignar los fondos para el muro entre Estados Unidos y México.
“No te puedo decir cuando el gobierno abrirá. Lo que si te puedo decir es que no va a abrir hasta que tengamos un muro o cerca, como sea que lo quieran llamar”, dijo el presidente.
Mientras tanto, Bowser dijo que son los residentes de D.C. quienes tendrán que pagar por algunos de los servicios provistos usualmente por el gobierno federal en la ciudad como por ejemplo, remover la basura de los parques nacionales, incluyendo el National Mall, un punto emblemático particularmente concurrido durante esta época por las vacaciones decembrinas.
“Esperamos que este mensaje resuene durante este cierre: los 702,000 residentes de Washington D.C., que pagan los impuestos más altos per capita a la Tesorería Federal, están asumiendo los costos de los servicios federales durante el cierre del gobierno, mientras que somos los únicos ciudadanos en Estados Unidos continental sin un voto en el Congreso”, dijo Bowser.
