Los líderes del sindicato más grande de Metro y los funcionarios del sistema de transporte público han sostenido su primera reunión desde que los trabajadores de Metro votaron abrumadoramente para autorizar una huelga, pero parece que poco se ha resuelto.
Los funcionarios de la Autoridad de Tránsito del Área Metropolitana de Washington se reunieron el martes con los líderes del sindicato Amalgamated Transit Union Local 689 en un lugar secreto, tras la votación del gremio el domingo.
Las huelgas están prohibidas según el convenio colectivo de Metro con el sindicato, pero los trabajadores han estado sin contrato desde julio de 2016. El portavoz del sindicato, David Stephen, dijo en un comunicado que "no hubo cambios en la posición de ninguna de las partes".
WMATA emitió una declaración llamando la reunión "una discusión constructiva y franca". Las dos partes planean reunirse nuevamente el miércoles.
Una huelga de los empleados probablemente paralizaría el sistema y obligaría a los usuarios de trenes y autobuses a encontrar formas alternativas de moverse.
"Se trata de la persona para la que trabajamos. Se trata de la empresa para la que trabajamos. No es contra el público", dijo Jackie Jeter, una líder sindical.
El sistema de tránsito público transporta alrededor de un millón de pasajeros diariamente.
