Un panel de tres jueces negó esta semana la solicitud de rebajar la condena a un hombre que pretendió ser un oficial de policía y abusó sexualmente de una mujer hispana en el condado Montgomery, en Maryland, hace más de una década.
En febrero de 2008, John Robert Lay fue hallado culpable de intento de violación en primer grado, ofensa sexual en primer y tercer grado y secuestro por crímenes que cometió en el 2005, cuando siguió a una mujer hispana que se acababa de bajar de un autobús en la calle Veirs Mill en Wheaton. Según documentos judiciales, el hombre le mintió a la víctima, diciéndole que era un policía y le enseñó una placa falsa. Luego, le dijo que estaba bajo arresto y la metió en su auto, donde fingió hablar a través de un radio sobre la falta de identificación y los “papeles” de la víctima.
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Lay después llevó a la mujer a un estacionamiento en Rockville, donde abusó de ella. Durante el incidente, la víctima se rehusó y le pidió repetidas veces que parara, de acuerdo con los documentos.
Pese a las amenazas del hombre, la mujer reportó lo sucedido a la policía esa noche.
Un año después del incidente, las autoridades lograron fichar al sospechoso gracias a evidencia de ADN hallada en la escena de la agresión. En ese entonces, el sospechoso ya se encontraba detenido por haber participado en un robo. Meses después, fue sentenciado a vida en prisión más 35 años.
Esta semana, los jueces se rehusaron a bajarle la pena, argumentando que sigue siendo “una amenaza a la comunidad hispana y a la comunidad de mujeres en general”, según la fiscal adjunta del condado Montgomery, Marybeth Ayres.
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“Él le dijo a la policía que buscaba a la gente latina porque ellas tenían miedo de deportación”, continuó la abogada.
Según los documentos, Lay admitió que constantemente manejaba su vehículo alrededor del área, tratando de buscar a mujeres que parecían “ilegales”.
Lay también fue encontrado culpable por crímenes parecidos en contra de mujeres inmigrantes en 2001 y 2005 en el condado Fairfax, en Virginia.
Las autoridades del condado Montgomery recuerdan a la comunidad que no deben tener miedo la hora de reportar un crimen, ya que no se le preguntará sobre su estatus migratorio.
“Nunca pediríamos papeles, ni identificación”, recalcó Ayres.
El fiscal Joe McCarthy subraya que su compromiso es proteger a todos los residentes del condado.
“Si es miembro de la comunidad inmigrante, estamos aquí para protegerlo. No nos importa su estado migratorio, no preguntamos sobre su estado migratorio”, dijo. “De hecho, si alguien de mi personal pregunta sobre su estado, lo despediría.”
