Todos los nuevos vagones del Metro necesitarán ser revisados y reconectados, según una revisión interna reportada por el portal WTOP.
La agencia de tránsito pagó casi $1.5 mil millones por los trenes. Si bien el problema del cableado no amenaza la seguridad de los pasajeros, podría causar inconsistencias y retrasos.
El informe de Metro encontró que los 548 autos tienen defectos en el cableado que no fueron detectados por el fabricante. Se estima que tomará un año arreglar todos. Asimismo, el estudio también encontró que 200 trenes de la serie 7000 necesitan reparaciones adicionales que se estima tardarán dos años en completarse.
"Otro problema, entre muchos que Metro parece tener", dijo el ciclista Peter Kissel. "Necesitamos que todas las jurisdicciones intensifiquen y financien a Metro como se suponía que debían hacer".
“Los vagones de la serie 7000 de Metro siguen siendo, por mucho, los vagones de ferrocarril más confiables en la flota”, dijo en un comunicado de metro.
Metro agregó que está trabajando con el fabricante para inspeccionar y reparar los autos.
"Las inspecciones se realizarán durante los horarios normales de mantenimiento sin costos adicionales para Metro y no tendrán ningún impacto en el servicio", dijo el comunicado.
