Un aparente caso de acoso escolar terminó con el apuñalamiento del padre de la presunta víctima en el condado de Prince George’s, y ahora esa familia hispana clama por justicia.
La presunta víctima del acoso escolar, de 14 años, asegura que por meses vivió episodios de maltrato en Buck Lodge Middle School por parte de dos estudiantes.
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“Me decían sos seca, fea, cosas así, y tratandome mal…a veces me jalaban el pelo”, dijo la adolescente.
Sus padres hablaron con los directivos de la escuela, la policía e incluso la familia de las presuntas agresoras, pero nada de eso impidió que todo terminara en violencia.
Ricardo Amaya dice que no se imaginó que al tratar de resolver un problema de acoso escolar el 28 de mayo recibiría seis puñaladas frente a su vivienda. Agrega que quien sostenía la navaja y supuestamente propinó los golpes es el padre de las dos alumnas que al parecer acosaban a su hijastra.
“Me atacaba con la cuchilla. No podía dejarlo pasar tampoco, que le pasara algo a mi hija tampoco. Fue gracias a Dios, es un milagro que estoy despierto”, dijo Amaya. “Yo traté dos veces, traté de hablar con él como personas civilizadas en el punto en que llegar a un acuerdo, ya que dicho éramos vecinos. Para poder evitar los problemas nos movimos del apartamento”.
Para frenar el acoso que sufría su hija, Amaya y su esposa Sonia Soto aseguran que cumplieron con todos los protocolos: se comunicaron con las autoridades escolares, pero sienten que no funcionó.
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“Si nos hubieran reunido con la madre de estas niñas, tal vez – o la policía hubiera hecho algo”, dijo Soto.
El sistema de escuelas públicas del condado Prince George’s le respondió a Telemundo 44 que las presuntas agresoras fueron suspendidas tras un incidente en un autobús escolar y que sus horarios fueron modificados para que no se cruzaran con las víctimas.
También dijeron que “cuando ocurre intimidación entre estudiantes en la escuela, el personal sigue las acciones correctivas apropiadas, incluida la mediación y la implementación de medidas disciplinarias contra los estudiantes involucrados”.
Amaya y Soto dicen que cuando comenzaron los altercados en su vecindario con los padres de las otras estudiantes, también llamaron a la policía varias veces.
“El policía no tomaba mucha importancia… la escuela tampoco”, dijo Amaya.
El Departamento de la Policía del Condado Prince George’s se limitó a decir que está investigando el apuñalamiento y otro incidente entre estas familias que calificó como una disputa vecinal.
En este momento, hay una orden de captura contra el sospechoso de haber apuñalado a Amaya.
