Thomas Daniel Hawks, el conductor ebrio que causó un accidente que cobró la vida de tres hermanos salvadoreños, ha sido sentenciado este jueves a 22 años en prisión y cinco bajo libertad condicional.
Hawks enfrentaba una condena máxima de 36 años tras las rejas.
El caso sacudió a la comunidad hispana de la región de Washington. Tres niños – Alexander y Rosalie, mellizos de 5 años, y Abraham, de solo uno – perdieron su vida por la imprudencia de un hombre. Sus padres – Juanita y Alexis - desolados tras perder a todos sus hijos.
"Me quitó la vida y la de mis hijos", dijo la madre de los niños, Juanita Mejía, dentro de la sala de corte, antes de la sentencia.
Tras conocerse el dictamen, la fiscal del condado de Prince George's Aysha Braveboy dijo que esto establece un precedente de cómo lidiarán con estos casos.
"Necesitamos movernos rápido para traerle justicia a las familias afectadas", dijo.
Los hermanitos Mejía murieron la noche del 30 de diciembre de 2018 luego de que la camioneta pickup manejada por Hawks se estrellara contra el vehículo de la familia en la Indian Head Highway, en Oxon Hill, Maryland.
“Hay días que yo me desespero por tener a mis hijos, lloro”, dijo poco después del siniestro a Telemundo 44 Juanita Mejía. “Estamos pasando por un momento tan doloroso. Estamos sufriendo el golpe no solo de un hijo sino de tres”.
Hawks, de 27 años, quien según la Policía acababa de salir de un juego de los Redskins, manejaba a una velocidad más alta de la permitida y tenía un nivel de alcohol en la sangre de 0.17, más del doble del límite legal en Maryland, cuando se produjo el choque.
La familia Mejía, que reside en Falls Church, Virginia, se encontraba regresando de la iglesia.
Hawks fue arrestado en enero y luego liberado bajo fianza mientras esperaba por su juicio. El 1ro de julio, se declaró culpable de varios delitos, incluyendo tres de homicidio vehicular como resultado de negligencia y dos por causar heridas graves con un vehículo mientras estaba bajo la influencia del alcohol.
La Ruta 210, también conocida como la Indian Head Highway, se ha convertido en una de las autopistas más peligrosas de la región, hasta el punto de que ocasionalmente es llamada “la carretera de la muerte”.
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Esta es una historia en desarrollo.
