
Un voluntario del norte del estado de Nueva York que trabajaba con jóvenes en riesgo en Washington DC, fue asesinado a tiros mientras caminaba hacia su casa el jueves por la noche.
La policía informó que Ryan Realbuto, de 23 años, de Pittsford, Nueva York, murió durante un presunto robo en South Dakota Avenue NE. Las autoridades buscaban un Honda Accord de color oscuro en relación con el asesinato.
Quienes conocieron a Realbuto dijeron que había encontrado una vocación que encajaba perfectamente con su personalidad.
“Era una persona profundamente afectuosa que siempre trabajaba muy duro para entender lo que decía la gente”, indicó el hermano Stephen Cantwell, de la organización católica de voluntarios Capuchin Corps.
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Realbuto había sido voluntario en la organización en DC.
“Hacen diferentes ministerios. Ryan estaba en la escuela secundaria Don Bosco Crista Reyes. Él estaba ayudando a los estudiantes allí”, detalló Cantwell.
El jueves por la noche, poco después de las 10 p.m., Realbuto regresaba de un evento en la Iglesia Católica Inmaculada Concepción en Shaw. Fue una Hora Santa, un período de adoración de la Eucaristía, seguido de una reunión para los jóvenes católicos de la zona.
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Él y dos amigos casi estaban en casa mientras caminaban desde la estación de metro Fort Totten hasta la casa grupal que compartían.
Según la policía, mientras caminaban por la avenida Dakota del Sur, un automóvil se detuvo y alguien dentro les pidió dinero.
"Vivimos cerca y escuchamos un disparo", relató la vecina Sara Almgren.
La policía dijo que alguien en ese auto le disparó a Realbuto después de que él les dijera que no tenía dinero.
“Salimos corriendo y vimos caer a un joven cerca del McDonald's”, agregó Almgren.
Hubo gritos de ayuda y la policía recibió múltiples informes del tiroteo al 911. Almgren intentó auxiliar a Realbuto hasta que llegó una ambulancia. Él fue declarado muerto en el hospital.
Parte del objetivo del programa de Realbuto es que los voluntarios vivan en las comunidades a las que sirven.
“Nosotros, los frailes, vivimos en áreas mucho más difíciles que ésta, por lo que estamos un poco sorprendidos de que esto haya sucedido aquí”, señaló Cantwell.
Almgren dijo que “nunca se ha sentido insegura” o “asustada” en el vecindario.
Mientras tanto, quienes conocieron a Realbuto contemplan la pérdida. Entre la orden con la que se presentó como voluntario contemplan su misión.
“Oremos por todos, incluso por aquellos que cometen estos actos, porque todavía tienen una oportunidad de arrepentirse como todos los demás”, resaltó Cantwell.
La policía de DC indicó que están buscando al asesino de Realbuto y que hay disponible una recompensa de $25,000 por información que conduzca a un arresto y condena.