Un hombre de Alaska y dos policías rescataron a una cría de alce de lo que la policía describió como una "muerte segura" después de que cayera a un lago y quedara atrapada en un estrecho espacio entre un hidroavión y un muelle.
Spencer Warren, empleado de la empresa de turismo al aire libre Destination Alaska Adventure Co., había llegado al trabajo alrededor de las 6:30 a.m. del viernes para preparar un hidroavión para el viaje del día cuando oyó lo que le pareció un extraño sonido de pájaro.
Rápidamente vio a la cría del alce atrapada entre los flotadores del avión y el muelle en el lago Beluka, en Homer, una comunidad de la península de Kenai, a unas 220 millas al sur de Anchorage. Los flotadores reemplazan las ruedas del avión, que le permite despegar en tierra y agua.
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Él inmediatamente pensó "Oh, no, ¿dónde está su madre? sé que está cerca," antes de ver a la angustiada madre cuatro pies más lejos con otra cría. Las madres de alce son muy peligrosamente protectoras con sus crías— un fotógrafo fue asesinado por una madre alce que estaba protegiendo a su cría el mes pasado en Homer.
La cría de alce intentaba salir del lago, pero no conseguía apoyarse con las pezuñas en la parte superior del flotador metálico. Su cautelosa madre impedía que Warren, el posible salvador, se acercara demasiado.
"Es como una pista de hielo para los alces y sus pezuñas," dijo Warren sobre el rescate del viernes. "Entonces se seguía resbalándose y resbalándose y no podía levantarse."
Warren habló con su jefe, quién llamó a la policía de Homer.
Un agente terminó situando su vehículo policial entre la mamá alce y el hidroavión para permitir que otro agente y Warren rescataran a la cría, según explicó a The Associated Press el teniente Ryan Browning, de la policía de Homer.
La cría tenía una pata extendida sobre la parte superior del flotador del avión, donde estaba atascada.
"Por suerte, no se movía, lo que facilitó un poco el rescate", dijo Warren. "Simplemente lo sacamos y lo pusimos en el muelle".
La cría, exhausta, se tendió en el malecón hasta que un agente la ayudó a levantarse. La cría se reunió con su madre y ésta le lamió el agua del cuerpo, todo ello grabado por Warren.
"Siempre que puedes rescatar a una criaturita, te sientes bien", dijo Browning.
