MIAMI, Florida - Hace más o menos un año que Delfina Pan dejó su país, Argentina, y llegó a Estados Unidos para abrirse un nuevo camino, pero murió asesinada en Miami Beach el lunes 29 de noviembre.
Sus allegados no comprenden esta trágica muerte y se preguntan por qué tuvo que suceder.
El lunes por la tarde, Pan, de 28 años, llegó al apartamento que compartía con una amiga en el área de la pequeña Buenos Aires. Aparentemente estaba sola. Su agresor la habría seguido hasta allí, según su vecina, obsesionado con ella.
Adelina Hernández, vecina de Pan, contó lo que observó ese día. “
Recibe las noticias locales y los pronósticos del tiempo directo a tu email. Inscríbete para recibir newsletters de Telemundo Washington aquí.
Yo vi todo. Como estaba el cuerpo en el piso, el chico con el torso desnudo y con el cuchillo le daba al cuerpo y se daba él”, dijo Hernández.
El certificado del médico forense confirmó que Pan recibió puñaladas en su cuello y murió a las 7:05 p.m. del lunes en el hospital Jackson Memorial.
“Ella era única hija de su mamá, yo tengo una sola hija, también, y solamente de imaginarme que me pasara eso, tampoco querría vivir”, agregó su vecina.
Los amigos de Pan están inmersos en el dolor. Dijeron que su muerte es injusta, sin sentido, y participaron de una misa en su memoria junto a los vecinos del condominio donde ella vivía.
Pan trabajaba en un restaurante de Miami Beach. Una compañera de trabajo que pidió preservar su nombre contó que el presunto responsable de esa muerte sería un compañero de trabajo, que el lunes, cerca de las 5 p.m., abandonó su puesto. Dos horas después, Delfina Pan estaba muerta.
Sheila García, actriz española y amiga de Pan, dijo: “Delfina era una niña. Es que tiene 28 años, tenía 28 años. Una niña con muy buen corazón, muy profesional y que se fue a Miami buscando un futuro”.
Aunque la policía local aún no lo confirmó, el agresor estaría ingresado en el hospital Jackson Memorial, donde lo llevaron como consecuencia de heridas cortantes, cuando aparentemente intentó suicidarse tras el hecho.
