Casa Ruby, un centro bilingüe con base en Washington, D.C. reconocido nacionalmente por ayudar a la comunidad LGBTQ, está en la búsqueda urgente de un nuevo espacio luego de una disputa con el propietario del edificio.
El miércoles se conmemoró el Día Internacional de la Visibilidad de las Personas Transgénero, y Casa Ruby, un centro bilingüe con base en Washington, D.C. reconocido nacionalmente por ayudar a esa comunidad, está urgentemente en la búsqueda de un nuevo espacio luego de una disputa con el propietario del edificio.
El desacuerdo tiene un origen en la necesidad de reparaciones eléctricas y retrasos en el pago de renta.
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“El día de mañana quiero llorar de felicidad de saber que la gente que viene a este espacio va a poder seguir llegando y que van a salir de aquí con algo que necesita”, dijo Ruby Corado, directora de Casa Ruby.
Hace casi cuatro años, Casa Ruby se mudó de una casa adosada pequeña y alquiló un inmueble espacioso en la cuadra 7500 de Georgia Avenue NW. Esta oportunidad le permitió a Corado expandir sus servicios para los jóvenes LGBTQ, muchos de los cuales sobrevivían en las calles.
“Duele haber invertido tanto en un espacio… casi más de medio millón de dólares y tenemos que salir de aquí”, aseguró.
Corado, que ha dedicado 30 años a sus esfuerzos por rescatar a los más vulnerables de las calles, está lista para voltear la página, pero sabe que el camino no será fácil.
“Tenemos una cantidad de situaciones que no podemos remediar y tenemos que buscar un lugar nuevo donde podamos continuar brindando los servicios de Casa Ruby.”
Local
La directora espera que en un nuevo edificio pueda “unir” los recursos del centro - una cocina, un estar y otros espacios - en un solo lugar.
En un comunicado, Mentiki Group, el propietario del edificio dijo a TELEMUNDO 44:
“Durante los últimos casi cuatro años, hemos tenido una relación productiva y valiosa con Casa Ruby y continuamos abiertos a trabajar con ellos. Es importante clarificar que Casa Ruby está actualmente habitando la propiedad y no hemos tomado acción para desalojarlos. No tenemos planes inmediatos para hacerlo pese a que no han estado al día con su renta desde 2018 y están atrasados con pagos que superan los $450,000”, se lee.
Un GoFundMe ha sido abierto para ayudar a la organización a levantar los fondos que necesitan para hallar una nueva locación.
