COVID-19

Tepito, el popular barrio bravo, se resiste a bajar las cortinas por la pandemia

Comerciantes debaten si cierran o no sus negocios, pese a las medidas de mitigación impuestas en México.

EFE Calles y comercios informales del barrio de Tepito, en Ciudad de México, lucen semivacíos.

MÉXICO - Los comerciantes del popular barrio de Tepito, en el Centro de Ciudad de México, debaten estos días entre cerrar sus negocios o seguir intentando las ventas en días donde la clientela ha ido a la baja, hasta casi desaparecer, debido a la emergencia sanitaria de la COVID-19.

Este lunes, en un recorrido se constató que un 60 de los locales establecidos y puestos ambulantes (móviles) estaban ya cerrados, con las cortinas abajo o en el caso de los móviles, con mantas o en el "esqueleto" del que se compone su estructura tubular.

En tanto, el 40% restante mantiene sus locales abiertos, pero sin los miles de compradores que se veían en el barrio, ya piensa en echar los candados y guardar las mercancías, pero les invade la duda de cuándo será la reapertura aunque ellos piensan que solamente descansarán estos días cuando se cumple la Semana Santa católica.

"Esperemos que nos dejen trabajar las autoridades. Nosotros vamos al día y no tenemos otra entrada de dinero", dijo Alma, una mujer que comercializa teléfonos móviles.

"¿De qué vamos a vivir?", cuestionó la mujer. "Una semana podemos aguantar pero no creo que más", apuntó.

La mujer, junto con miles de comerciantes, salieron este lunes en espera de los clientes, pero este martes cerrarán, el tradicional día de descanso para los comerciantes del llamado "barrio bravo" de Tepito y el miércoles será la "prueba de fuego" para saber cuántos más decidieron parar.

Mientras la venta de cerveza se ha disparado en todo el país, ya empieza a escasear el producto.

Las escenas de enormes aglomeraciones y de miles de transacciones por minuto han quedado atrás en estos días y han dado paso al vacío, soledad y quietud en todas las calles del popular barrio.

"Van a cerrar los que tengan miedo ¿quién nos va a dar de comer?, ¿nos va a matar el coronavirus? No, lo que nos va a matar será miseria que va a llegar", dijo Marco, un comerciante que vende gorras (cachuchas) y lencería.

Desde este lunes, en Ciudad de México pausaron actividades en cines, museos, teatros y gimnasios; además, diversas empresas se sumaron al trabajo desde casa, lo que disminuyó visiblemente la actividad comercial.

El hombre dice que él y su familia seguirán abriendo hasta que puedan o se los permita la autoridad.

En el barrio y su alrededores, según estimaciones, se colocan unos 5,000 comerciantes.

Para otro vendedor de ropa, Santos, los comerciantes están cerrando por que "no hay gente" y pese a la emergencia y las bajas ventas "Tepito resiste".

El subsecretario de Salud dijo que los mexicanos están ante la última oportunidad para ralentizar el contagio y evitar una situación caótica.

Hace unos días, el gobierno de Ciudad de México llamó a los comerciantes del Centro Histórico a reducir sus actividades y cerrar debido a la emergencia sanitaria, pero los vendedores pidieron a las autoridades no cerrar por completo y propusieron a las autoridades alternar los días de apertura y cierre.

México llegó este lunes a 125 fallecidos a causa de la COVID-19 al morir en las últimas 24 horas 31 personas, mientras que el número de casos confirmados ascendió a 2,439, informaron las autoridades sanitarias.

Exit mobile version