MOUNT RAINIER - Una exempleada de la ciudad de Mount Rainier, en Maryland, asegura que fue despedida poco después de reportar que un oficial de policía de la localidad la había agredido sexualmente.
Un número de oficiales y empleados, incluyendo el jefe de la policía, renunció luego de que trascendió la acusación de la mujer.
La supuesta víctima se unió al Departamento de Policía de Mount Rainier como una empleada administrativa en el 2014. Por al menos dos años, un sargento de la policía la atacó sexualmente en más de doce ocasiones, cuando ambos trabajaban hasta altas horas de la noche, según cuenta María, quien prefirió permanecer en el anonimato.
“Yo he sido la víctima”, dijo. “Me gustaría que me devolvieran mi empleo”.
Durante una entrevista, María recordó una de las presuntas agresiones. “Agarró mi mano, la puso en su parte [privada] y me empujó”, dijo. “Luego de que eso pasó, salí corriendo de su oficina y directo al baño para vomitar”.
María dijo que no reportó el abuso antes porque tenía temor. “Le tenía miedo a él”, explicó. “Tenía miedo de contarle a alguien.”
El año pasado, el departamento de Policía de Mount Rainier se vio impactado por varias acusaciones, incluyendo la de María. El jefe, el oficial acusado y otros miembros dimitieron.
La gerente de la ciudad Miranda Braatz dijo que la localidad ha estado aplicando cambios.
“Todos los empleados que fueron acusados de acoso sexual ya no trabajan con el Departamento de Policía de Mount Rainier”, aseguró. “Así que no solo hemos cambio los líderes en la cima, pero hemos cambiado significativamente el personal en nuestro departamento de policía.
El nuevo jefe del cuerpo de policía dice que ya han realizado varias modificaciones.
“Ciertamente sabía que al meterme en esto una de las cosas que eran muy importantes para era reestablecer la confianza con la comunidad, con el departamento y el ayuntamiento, y la confianza con los oficiales y conmigo”, dijo el jefe Anthony Morgan.
El oficial acusado no está siendo identificado en este artículo porque nunca se le presentaron cargos. Sin embargo, ahora trabaja para el Departamento de Policía de Seat Pleasant.
María se tomó un año sin trabajar para lidiar con lo que, según ella, pasó. Cuando regresó a su viejo empleo, le dijeron que su posición ya no existía. La gerente de la ciudad se negó a comentar sobre el futuro de María con la localidad, citando un litigio pendiente.
