La Junta del Condado Arlington busca que los residentes migrantes que no tienen documentos legales y de bajos ingresos puedan algún día ser elegibles para recibir subsidios de vivienda.
Las autoridades de Arlington estudian la posibilidad de ofrecer subsidios de vivienda a solicitantes que no cuentan con un estatus legal de acuerdo, luego de que recibieran una carta del Centro de Justicia de Asistencia Legal, que describía formas en que podía ser legalmente posible.
“En los últimos años, el condado de Arlington ha experimentado un incremento económico, pero sólo para un sector de la comunidad, y todavía hay muchas personas que tienen ingresos muy menores”, dijo Larisa Zehr, abogada del Centro de Justicia de Asistencia Legal.
Hasta el momento, las autoridades del condado no han proporcionado una estimación de cuántos hogares totalmente serían elegibles para recibir este apoyo, pero el estudio del Centro de Justicia de Asistencia Legal señaló que solo 50 hogares adicionales costarían más de $400,000 cada año.
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“Lo que sabemos es también en el norte de Virginia, las personas pagan más de su ingreso en renta que casi cualquier otro lugar metropolitano en los Estados Unidos. O sea, las personas de bajos recursos están muy impactadas por los altos costos de renta, específicamente en el norte de Virginia”, dijo Zehr.
El cambio también aceptaría que las viviendas con estatus migratorio mixto pudieran solicitar la ayuda.
“Recibir ese tipo de subsidio lo que va a hacer es ayudar a las comunidades inmigrantes, las familias inmigrantes de quedarse en Arlington, de seguir contribuyendo a la vida del condado. Pueden quedarse en sus barrios, pueden quedarse en sus mismos trabajos, sus hijos e hijas pueden quedarse en las mismas escuelas”, dijo Zehr.
Local
El número de personas que reciben subvenciones para viviendas en Arlington ha aumentado en más de 200 familias desde marzo de 2020, según este estudio.
“Es una oportunidad para mostrar que sí apreciamos a nuestros vecinos y vecinas, que sí queremos que permanezcan en el condado y que queremos que tengan un futuro seguro donde no están pagando todo lo que ganan simplemente para pagar su vivienda. La vivienda es un derecho, es una necesidad y es una oportunidad de garantizarlo”, dijo Zehr.
El estudia también recomienda varias expansiones al programa de subsidios de vivienda que incluyen reducir la responsabilidad de alquiler para los beneficiarios de subvenciones del 40% de sus ingresos familiares al 35%, cubrir una parte de sus facturas de servicios públicos, elevar el límite de ingresos máximos de los beneficiarios al 50% del ingreso medio del área.
Si el condado adopta todas las sugerencias, el programa necesitaría más de $9 millones en fondos adicionales. Independientemente de si esta propuesta avanza, el condado ya está en camino de ampliar el programa de subsidios de vivienda este año. Se espera que el programa de más de $15 millones aumente un 5% en el próximo año fiscal.
