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“Le mando un abrazo hasta el cielo”: Hispano muere luego que auto impactara su hogar en Laurel

La víctima, Fredy Tenas Silva, pasó más de dos décadas en Laurel, y recientemente estaba trabajando en un lavado de autos. Lo sobreviven sus cinco hijos y su esposa, que sigue en Guatemala.

Telemundo

Un hombre guatemalteco está de luto después de que su padre murió tras ser atropellado cuando un auto chocó contra su edificio y entró a su apartamento en Laurel. 

Según las autoridades, Fredy Tenas Silva, de 56 años, estaba dormido en su cuarto cuando un vehículo impactó su pared. Cuando los oficiales llegaron para investigar la colisión, encontraron que el edificio en la cuadra 800 de Kay Court había colapsado, informó la policía de Laurel. 

Ahora, Edgar Tenas González dijo que el enorme hueco resultado del accidente mortal no se compara con el vacío que queda en su corazón. En un instante, la vida de su padre cariñoso y trabajador llegó a su fin.

“Me siento todavía en shock por el trágico accidente que sufrió mi padre”, le dijo a Telemundo 44 al exterior de las oficinas del consulado de Guatemala en Rockville, Maryland. 

Todo el día estuvo ahí trabajando en el proceso para repatriar los restos de su padre a su país natal. Estuvo acompañado de su hermano, Juan, quien también se encontraba dentro del apartamento cuando ocurrió el choque. 

“Le agradezco a Dios porque a mi hermano… él salió ileso. Está vivo”, dijo Tenas González. 

La policía de Laurel asegura todavía estar trabajando en la investigación para determinar qué fue lo que ocurrió que llevó al accidente mortal.

Laura Guenin, la vocera del Departamento de la Policía de Laurel, dijo que están investigando todas las posibilidades, y afirmó que si después de la investigación tienen que interponer cargos al conductor, lo harán.

“Yo lo que exijo... es que se haga justicia. Porque este accidente de mi padre no se puede quedar así”, dijo Tenas González. 

Fredy Tenas Silva pasó más de dos décadas en Laurel, y recientemente estaba trabajando en un lavado de autos. Lo sobreviven sus cinco hijos y su esposa, que sigue en Guatemala.

“Le mando un abrazo hasta el cielo. Tal vez el abrazo que no le di cuando nos vimos la última vez. Y solo espero en mi Dios que esté descansando en paz”, dijo su hijo. 

La familia está recaudando fondos en línea para ayudar con los gastos de repatriación.

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