Irvo Otieno, un hombre negro de 28 años que murió el mes pasado en un hospital psiquiátrico de Virginia, falleció por “asfixia posicional y mecánica con restricciones”, reveló la oficina del médico forense el lunes.
Arkuie Williams, el adjunto administrativo de la Oficina del Médico Forense del estado, confirmó los hallazgos de la causa de la muerte a The Associated Press después de que los abogados de la familia de Otieno los compartiesen por primera vez en un comunicado. La forma de muerte fue homicidio, escribió Williams en un correo electrónico.
Otieno, que luchaba contra una enfermedad mental, murió el 6 de marzo después de que lo inmovilizaran en el suelo mientras ingresaba en el Hospital Central State en el condado Dinwiddie.
El video publicado a principios de marzo mostró a los agentes del alguacil y empleados del hospital sujetando a Otieno esposado y encadenado durante unos 20 minutos después de que lo condujeran a la fuerza a una habitación del hospital. Durante gran parte de ese tiempo, Otieno estuvo boca abajo en el suelo, atrapado por un grupo tan grande que a veces bloqueaba la visión de la cámara.
El personal que se dio cuenta de que parecía flácido y sin vida eventualmente comenzó los esfuerzos de reanimación, mostró el video.
“La causa oficial y la forma de la muerte no nos sorprende, ya que corrobora lo que el mundo vio en el video”, informaron los abogados de la familia Ben Crump y Mark Krudys en un comunicado.
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“En un paralelo escalofriante con el asesinato de George Floyd, Irvo fue retenido, abatido y excesivamente restringido hasta la muerte, cuando debería haber recibido ayuda médica y compasión. Es trágico que se haya perdido otra vida por esta técnica de restricción maliciosa y mortal”, agregaron.
Siete oficiales y tres trabajadores del hospital han sido acusados de asesinato en segundo grado por la muerte de Otieno.
El fiscal local que presentó los cargos dijo anteriormente en el tribunal que Otieno murió asfixiado.
La oficina del médico forense no puede divulgar información adicional de la autopsia más allá de la causa y la forma de la muerte, aclaró Williams.
Otieno fue enterrado la semana pasada. El líder de los derechos civiles, el reverendo Al Sharpton, y otros oradores en su funeral dijeron que su muerte muestra la necesidad de reformas policiales y de salud mental.
La familia de Otieno y sus abogados han dicho que Otieno estaba experimentando angustia mental en el momento de su encuentro inicial con la policía, días antes de que lo llevaran al hospital estatal. Primero fue puesto bajo custodia policial en el condado Henrico el 3 de marzo, cuando fue transportado a un hospital local para recibir tratamiento de salud mental bajo una orden de custodia de emergencia.
La policía ha dicho que mientras estaba en el hospital local, "se volvió físicamente agresivo con los oficiales", momento en el que lo arrestaron y lo llevaron a una cárcel local, algo que la familia de Otieno dice que nunca debería haber sucedido dado que necesitaba tratamiento. En la tarde del 6 de marzo fue trasladado al hospital estatal, que cuenta con una unidad que brinda atención a personas ingresadas desde cárceles o por orden judicial.
Algunos de los abogados de los acusados por su muerte han dicho que sus clientes solo estaban tratando de contener a Otieno. La familia de Otieno y sus abogados argumentaron que no representaba ningún peligro para ellos y que simplemente estaba tratando de respirar durante el encuentro en el hospital que se muestra en el video.
A todos los acusados se les otorgó fianza y los registros judiciales muestran audiencias previas al juicio en abril o mayo.
AP buscó comentarios sobre los hallazgos del médico forense de los abogados defensores de cada uno de los acusados. Los abogados Emily Munn, Emilee Hasbrouck y G. Russell Stone se negaron a comentar.
El abogado Ed Riley, que representa a uno de los agentes, dijo que no podía comentar sobre los méritos de los hallazgos sin haber visto el informe completo de la autopsia. Añadió que le preocupaba que las declaraciones públicas de los abogados de la familia de Otieno, así como otras divulgaciones públicas del caso, incluido el video, pudieran obstaculizar el derecho de los acusados a un juicio justo.
Otros abogados no respondieron a los mensajes telefónicos y de correo electrónico en busca de comentarios.
