Una jueza federal le concedió el martes prisión domiciliaria a Ruby Corado, fundadora de la organización sin fines de lucro Casa Ruby, mientras espera su juicio por cargos de fraude y lavado de dinero.
Para cumplir con las condiciones de prisión domiciliaria, Corado se quedará en casa de su sobrina, debe permanecer bajo confinamiento las 24 horas del día y estará monitoreada con un dispositivo con GPS. Además, la acusada solo podrá salir de la casa para ir a consultas médicas y para presentarse en corte.
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La fiscalía argumentaba que existía un riesgo de fuga, ya que Corado viajó a El Salvador poco después de que saliera a la luz la supuesta malversación de fondos.
Mientras tanto, la defensa argumentó que ir una prisión sería potencialmente peligroso ya que Corado es una mujer transgénero.
Telemundo 44 consultó con el abogado constitucionalista Joseph Maluf sobre en qué tipo de prisión Corado debería pagar su condena si fuera hallada culpable de los cargos, los cuales llevan una posible sentencia de entre 20 y 30 años.
“Muchos estados permiten que la persona elija dónde se sienten más cómodos. En el caso de Corado, si fuera una prisión federal, por su puesto entonces va a poder escoger si quiere ir a una prisión de hombres o mujeres”, dijo.
A Corado se le quitó el pasaporte cuando fue detenida y la jueza le prohibió acercarse a un consulado salvadoreño para sacar un pasaporte nuevo.
El miércoles a las 9 a.m. será liberada de su lugar de detención para ser llevada a la casa de su sobrina.
