RANCHO LA MORA, Bavispe.- Al concluir el sábado con la dolorosa tarea de sepultar a quienes fueron masacrados en una zona serrana entre los estados de Sonora y Chihuahua, un tercio de las familias que habitan La Mora optó por emigrar a Estados Unidos.
Así, diez de las 31 familias que se asentaron e hicieron florecer esta comunidad fronteriza hicieron sus maletas y abordaron sus vehículos pare iniciar una nueva vida en Nebraska y Utah.
El éxodo fue considerado un duro reclamo al gobierno mexicano por falta de garantías en materia de seguridad, ya que de las amenazas el crimen organizado pasó al ataque y la semana pasada asesinó a tres mujeres y seis niños de las familias LeBarón, Langford y Miller.
Julián LeBarón, líder de la comunidad y activista social, dijo a medios mexicanos que el crimen organizado asentado en la región quieren las tierras propiedad de sus familias para traficar drogas de México a Estados Unidos.
“Muchos se mudaron desde del ataque a causa de amenazas. Requerimos mayor seguridad y también permiso para portar armas. No es posible que ellos estén con armamento mejor que el Ejército y a nosotros no nos permitan defendernos”, afirmó.
Pero no todos los habitantes de la comunidad binacional que se autodenomina mormona, aunque no pertenece a la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, están dispuestos a abandonar sus tierras, sus propiedades y cultura.
Sería permitir que los sicarios gocen de impunidad, dijo Adan Langford, líder de la comunidad en La Mora.
“Yo me quedo aquí hasta lo último, no podemos abandonar nuestra cultura; vamos a esperar que va a pasar, pero sí entiendo que puedan irse algunas familias a Estados Unidos”.
Langford dijo que buscarán opciones para mantenerse comunicados con sus familiares en Chihuahua sin necesidad de cruzar la sierra por tierra, ya que ahí es donde se asientan sicarios de grupos criminales antagónicos que se disputan la plaza.
