Algunos escaños de la Asamblea General de Virginia están en juego en las elecciones del 7 de noviembre, y la mirada de la legislatura hacia temas como el aborto podrían ser exponencialmente distintas dependiendo de quien se alza con el control de la cámara y el senado local.
“Virginia es un estado clave porque es el único estado del sur donde actualmente no hay una restricción o prohibición del aborto, entonces no solo protege los derechos reproductivos de las personas en Virginia sino de toda una region”, dijo Alejandra Soto, de la organización Planned Parenthood Action Fund.
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El debate continúa, y el estado hoy más que nunca es protagonista.
“Yo soy provida, y pienso que el aborto despues de ciertas semanas es un crimen porque los bebés pueden sentir el dolor”, dijo Art Estopinan, un analista republicano.
“Los demócratas no estamos promoviendo el aborto. Queremos que la mujer haga sus propias decisiones, que no sea una política machista diciéndole que es lo que tiene que hacer”, argumentó Walter Tejada, una estratega demócrata.
La preocupación para el área médica radica en que entre más restricciones, más serán las mujeres que recurren a clínicas clandestinas.
“Va a tener consecuencias complicaciones bastante severas”, dijo Sergio Rímola, el codirector asociado de Médicos Hispanos de EEUU. “Personas a veces pueden tener infecciones muy grandes que pueden ocasionar la muerte de la persona”.
Fuentes familiarizadas al plan del gobernador Glenn Youngking dijeron que restringir el aborto con excepciones será una prioridad de ganar la elección.
“Los médicos no pueden actuar como Dios y enviar a un aborto para matar al embarazo porque tiene una situacion genetica complicada”, dijo Estopinan.
Pero Rímola defendió su posición: “Se ha radicalizado tanto que en muchos lugares en este momento ni siquiera se permite que esta persona logre interrumpir ese embarazo, sino que lo lleve hasta el término, lo cual va a ocasionar un problema emocional y psicológico”.
Según la Asociación Nacional para Mujeres, 6.7 millones de latinas viven en estados donde el aborto tiene restricciones. Ahora, una de las preguntas es si el resultado de esta elección abrirá las puertas para que las hispanas de Virginia se sumen a este conteo.
“Son decisiones personales, decisiones médicas, decisiones de familia. No pertenecen a los legisladores, así de sencillo”, dijo Soto.
