La junta escolar del condado Fairfax, en Virginia, votó la noche del martes a favor de un plan según el cual algunos estudiantes y profesores regresarían a los planteles educativos en octubre.
El superintendente Scott Brabrand anunció un borrador de la propuesta el lunes, el cual establece que el 3.5% del distrito, lo que equivale a más de 6,700 estudiantes y 650 maestros, volverían a las instalaciones escolares para clases presenciales a finales de octubre.
Entre los estudiantes que verían las lecciones presenciales durante el “nivel operacional 2” del sistema escolar están niños pequeños con autismo, estudiantes de inglés como segundo idioma y alumnos de preparatoria que están viendo cursos de educación técnica y vocacional.
Brabrand dijo a la junta escolar el martes que la decisión final sobre el regreso gradual de los estudiantes dependerá de cómo avanzan los indicadores de salud del condado.
Los funcionarios escolares dicen que están vigilando la tasa de infección de COVID-19 en la jurisdicción y que han desarrollado un plan para responder a potenciales casos positivos en los salones.
Parte de cómo el sistema escolar introduciría gradualmente a los estudiantes sería agruparlos en cohortes que estarían juntos durante toda la jornada escolar para minimizar el riesgo de exposición.
Los planteles usarán más espacios, incluyendo las áreas al aire libre cuando sea posible, implementarán practicas de distanciamiento social en los salones y limitarán el número de visitantes y voluntarios en los edificios.
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Durante el transcurso del día, habrá chequeos de temperatura al azar, informó el sistema escolar.
Las escuelas requerirán que los padres y representantes firmen una planilla donde se comprometen a chequear la salud de su niño antes de enviarlo a la escuela.
Por su parte, los profesores serán preguntados sobre posibles síntomas de coronavirus cuando se reporten a trabajar cada mañana.
Con más de 187,000 estudiantes, Fairfax es el distrito escolar más grande de la región metropolitana.
