Por cuarto día consecutivo, Washington,DC rompió récord de calor, según el Servicio Nacional de Meteorología (NWS, por sus siglas en inglés).
La temperatura máxima en el Distrito llegó el miércoles 6 de septiembre a los 99 grados, sobrepasando el récord previo en 1954 de 98 grados. Las temperaturas históricas han convertido a este inicio del mes de septiembre en el más caliente de toda la historia en la región.
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Una emergencia de calor está en vigor en la capital, y los centros de refrigeración están abiertos. Mira aquí cuáles son.
Las escuelas públicas de DC cancelaron los programas deportivos al aire libre y los recreos, y las compañías ferroviarias han reducido la velocidad de los trenes para evitar que se deformen las vías.
En este horno al aire libre, los residentes del norte de Virginia también siguen sudando.
“Tengo 18 años viviendo aquí en Arlington y pues nunca se había visto la temperatura tan alta”, dijo la residente de Arlington, Ada Rivera.
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“Quería caminar un poco, pero me arrepiento salir caminando. Me voy pa’ casa”, dijo el residente Rudy de Alencar.
El fuego se palpa en el asfalto y no discrimina al atacar emprendedores, residentes, turistas, trabajadores del correo y hasta deportistas que se han lanzado a la calle luchando como puedan contra un sol que no tiene clemencia.
“El calor ahora es muy loco, pero decidí que no voy a dejar que me detenga, así que aquí estoy manejando mi bicicleta, pero también decidí que necesito un helado muy grande”, dijo Steve Thomas, otro residente de la ciudad.
Y Thomas lo consiguió en una camioneta de dueños salvadoreños que por más de dos décadas se ha convertido en la verdadera salvación durante los veranos ante el calor, con productos que van desde agua de coco hasta refrescos, y que les dejan muy buenas ganancias.
“Para nosotros es una bendición que haya calor, pero claro, se siente verdad, ya cuando llegamos a casa vamos hechas nada”, dijo la dueña Blanca Díaz.
El más vendido aquí es la minuta, un helado salvadoreño hecho con hielo raspado que lleva los mejores sabores de los países de latinoamérica y que cautiva y refresca a cualquiera en medio de las temperaturas.
“Siempre regresan, y eso para nosotros es mucha satisfacción, ofrecerle el producto muy hispano a ellos y hacerlos parte de nosotros”, afirmó Díaz.
Agregó que para estas alturas del año, normalmente el negocio estaría cerrando porque solo operan durante el verano. Sin embargo, debido al calor, considera extender su estadía.
El sábado y el domingo se esperan que las temperaturas regresen a los valores normales, entre los 80 grados.
