MÉXICO.- El presidente Andrés Manuel López Obrador endureció este jueves su mensaje hacia los periodistas mexicanos que lo cuestionaban insistentemente sobre las dudas y omisiones en la relatoría que su gobierno presentó sobre el operativo de captura y liberación de uno de los hijos de "El Chapo" Guzmán.
"Muerden la mano a quien les quitó el bozal", espetó López Obrador en un punto en el que los periodistas que acudieron a la conferencia matutina de medios insistían en saber con quién del Cártel de Sinaloa fue la negociación para liberar a Ovidio Guzmán.
El mandatario aclaró que se trataba de una frase histórica a atribuida a Gustavo Madero, en los albores del siglo XX.
Pero por la tarde, en redes sociales se dio a conocer que presuntamente Jesús Ramírez, director de Comunicación Social del gobierno de México, habría revocado la acreditación para cubrir "las mañaneras, como se conoce a la conferencia del presidente, de Luis Cardona, uno de los periodistas que preguntó con más insistencia.
Y la molestia de López Obrador y su portavoz también fue retomada por sus seguidores en redes sociales, que emprendieron una campaña contra los periodistas mexicanos bajo el hashtag #PrensaProstituida, con el que exhiben imágenes de reporteros que consideran hacen preguntas críticas al presidente.
Específicamente el mandatario arremetió contra dos medios en particular, a los que citó por su nombre, y contra la prensa en general por cubrir el operativo en Culiacán de manera, dijo, "amarillista" y sin pensar en el bienestar de los ciudadanos.
"Son lógicas distintas, a nosotros lo que nos importaba era que se salvaran las vidas y por eso la primera información...", respondió López Obrador a quienes le decían que su secretario de Seguridad, Alfonso Durazo, había mentido en el primer reporte tras el operativo.
"Son asuntos muy serios, que requieren responsabilidad, y no se puede por el amarillismo poner en tela de juicio una acción tan importante que es un parteaguas en lo que era una política autoritaria, que nunca fue cuestionada por los medios".
La confrontación con los medios no es inédito en México, ya que desde que López Obrador fue declarado presidente electo ha protagonizado desencuentros con los medios, y exhibe y critica a quienes reportan información que le es desfavorable o les exige que revelen sus fuentes.
Diversas organizaciones internacionales defensoras de los derechos de los periodistas han advertido el peligro que las palabras de López Obrador contra los medios significan en un país con una cifra alta de asesinatos de comunicadores.
