Una madre que perdió a sus tres hijas en un incendio registrado la madrugada del lunes en Hillcrest Heights, en Maryland, dijo el martes que nunca imaginó que viviría una tragedia de esta magnitud.
“Nunca, ni en un millón de años”, dijo Janise Creek, la madre de las tres hermanas de 9, 6 y 1 año, que fallecieron en el siniestro en una casa en Iverson Street.
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Creek dijo que, esa fatídica noche del domingo, sus hijas Jayla Brown, Nyjae Meade and Najahari Meade se fueron a dormir como era costumbre.
“Si me hubieses dicho que iba a ser la última vez, yo besando a mis bebés y metiéndolas en su cama y diciendo buenas noches, que esa iba a ser la última vez que la iba a ver”, dijo.
“No le deseo esto a nadie. No es ni siquiera dolor. No sé ni cómo llamarlo. No es real. El sufrimiento no es real”, continuó.
Jayla, de 9 años, hubiese empezado el 4to grado este otoño. Amaba los libros, la ciencia y la robótica, contó su mamá.
Nyjae, de 6, hubiese entrado a 1er grado. Era una niña graciosa que amaba las meriendas y era rápida para los chistes.
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La pequeña Najahari, de solo 1, ya había empezado a caminar. Era una “máquina de baile” llena de vida.
La hermana de las niñas, de 11 años, sobrevivió.
El padre de Nyjae y de Najahari, Nick Meade, escapó del incendio pero sigue hospitalizado con heridas serias.
Creek dijo que las autoridades le indicaron que el fuego se originó en la cocina, cerca de la estufa. Se despertaron cuando las llamas ya se estaban extendiendo rápidamente
Jayla, Nyjae y Najahari estaban dormidas en el segundo piso cuando estalló el incendio. La bebé fue hallada justo al lado de la puerta de entrada, donde Meade logró agarrarla antes de colapsar.
“¿Cómo sigo adelante?” preguntó la madre de las pequeñas una y otra vez.
