El gobernador de Virginia Ralph Northam declaró este domingo un estado de emergencia en respuesta a la “creciente violencia” registrada en los últimos días en algunas protestas a lo largo del estado. Esta medida le permite a las ciudades y condados acceder a más recursos en caso de que lo necesiten.
“Esta declaración de emergencia le dará el apoyo necesario a las localidades mientras trabajan para mantener a nuestras comunidades seguras”, dijo Northam en un comunicado. “Hay muchas voces que piden justicia y reconciliación a lo largo de los Estados Unidos y en nuestro estado, pero otros están explotando este dolor e incitando a la violencia.”
El estado de emergencia le permite a la Guardia Nacional de Virginia asistir a la policía en sus esfuerzos para "desescalar" protestas violentas. También asigna $350,000 para los gobiernos estatales y locales y para las operaciones de respuesta y recuperación.
Miles alrededor del país se han estado manifestado tras la muerte de George Floyd, un hombre negro esposado que falleció el 25 de mayo en Minneapolis después de que un policía le presionó el cuello con la rodilla hasta que dejó de respirar.
Cuatro oficiales del condado Prince William resultaron heridos durante una protesta en Sudley Road en Manassas. Las protestas empezaron pacíficas, pero la tensión aumentó en el transcurso de la noche. Varios autobuses fueron dañados y la policía arrestó a cinco personas. Se esperaban más manifestaciones la noche del domingo.
En Richmond, se registraron daños a varias propiedades y a monumentos confederados. La sede de las asociación de Hijas Unidas de la Confederación fue incendiaba y pintada con aerosol en su exterior.
En D.C. la policía usó gas pimienta contra los manifestantes cerca de la Casa Blanca la noche del sábado y la Guardia Nacional de D.C. fue activada tras reportarse incidentes de vandalismo.
Local
El alcalde de Richmond Levar Stoney extendió un toque de queda de 8 p.m. a 6 a.m. desde el domingo hasta el miércoles. Durante estas horas, las personas deberán permanecer en casa y solo podrán salir para buscar servicios de emergencia, dirigirse a su casa, lugares de trabajo y templos religiosos.
