La oficina del alguacil del condado de Fairfax ha puesto fin al acuerdo que tenía con La Oficina de Detención y Deportación, ICE por sus siglas en inglés, para dejar detenidas a las personas indocumentadas que habían sido liberadas.
Desde el 2012, este convenio permitía detener hasta 48 horas a personas que aunque habían sido puestas en libertad, estaban siendo buscadas por ICE. El objetivo era facilitar la deportación y la comunicación entre las agencias policiales.
La alguacil del condado de Fairfax, Stacey Kincaid, notificó la cancelación del acuerdo que retenía a los reclusos después de su liberación.
Esta noticia alienta a grupos pro-inmigrantes, que dicen es un paso para la restauración de la confianza entre la comunidad latina y los cuerpos policiales.
Según el comunicado, el condado si cumplirá con las solicitudes de ICE para retener a indocumentados que fueron liberados si la petición viene acompañada de una orden de detención criminal emitida por un tribunal.
"Tenemos la intención de cumplir con todas las obligaciones federales en lo que respecta a ICE," continúa el comunicado de la oficina de la alguacil de Fairfax.
"Terminar este acuerdo tendrá un impacto mínimo o nulo en las operaciones, ya que los agentes de ICE pueden entrar al centro de detención de adultos en cualquier momento."
Datos revelan que el año pasado, al menos 663 presos en la cárcel del condado de Fairfax habían sido entregados a ICE, más del doble que en el 2006.
